Vivir mi vida, sin depender de los demás. Aquellas personas que me acepten como soy, van a permanecer a mi lado. Las que no, van a quedar afuera de ella para siempre. No me voy a permitir preocuparme más por cosas que no valen la pena. La vida es una sola, y hay que vivirla con las ganas que se merece. No me importa más el que dirán, si hago las cosas fue porque en algún momento me hicieron sonreir, y si cometí un error, me sirvió para aprender y para no volver a cometerlo dos veces. Ahora tomo con pinzas todo lo que me dicen y pienso dos veces antes de confiar en algunas personas, y decir cosas que no debería. Soy frontal, transparente, sincera. Tengo mis malos momentos como toda persona: soy caprichosa, impulsiva, impaciente. Al que le gusta, bien. Y al que no...
